LA TÉCNICA DE LA ACEPTACIÓN RADICAL DE MARSHA LINEHAN

“He sido transformada por la misma terapia que desarrollé, porque una vez que me di cuenta de que tenía que enseñar a los clientes la aceptación, me di cuenta en ese mismo momento de mi propia vida personal que había perdido de alguna manera mi capacidad para aceptar y que tendría que aprenderlo yo mismo. Así que terminé tomando un tiempo sabático de mi trabajo. Lo que descubrí cuando fui al primer monasterio budista fue que en cuestión de días supe que había encontrado exactamente lo que necesitaban mis clientes. No tenía dudas al respecto. Comprendí de inmediato que la aceptación era exactamente lo que necesitaban, pero tenían una forma de enseñarla que yo podía traducir. Mi problema era que intenté llevarlo tal cual a mis clientes.

 Lo que descubrí cuando fui al primer monasterio budista fue que en cuestión de días supe que había encontrado exactamente lo que necesitaban mis clientes. 

En el monasterio, el mensaje básico era todo el tiempo tratar de aceptar radicalmente todo y dejar de lado los deseos y lo que quieres. Todos tenían trabajos todas las mañanas y esta idea de practicar el soltar el deseo de un trabajo en particular era algo que se enfatizaba constantemente. Si estabas barriendo, te decían que, cuando sonara la campana para detenerse, pararas de inmediato, incluso si no habías terminado, porque terminar era simplemente algo tuyo, algo que querías hacer. Simplemente, déjalo ir. Así que era toda una práctica de soltar constantemente, momento a momento, lo que querías y aceptar radicalmente lo que es.

Fue el primer entorno en el que estuve que era completamente no sexista. Pensé que había muerto y había llegado al cielo, no bromeo. Era tan increíble. Hombres y mujeres tenían los mismos trabajos, no había una distinción real. Puede que no hubiera sido saludable si me hubiera sumergido por completo en ello, pero dado que decidí de antemano que tenía que aprender esto, mi única opción era hacer todo lo que me dijeran, solo lanzarme y hacerlo. Éramos ocho estudiantes y hacíamos todo juntos. Fue realmente la práctica de dejar de tener que tener lo que quisieras en cualquier momento y el reconocimiento de que no tenías que tener siempre lo que quisieras, eso tuvo un gran efecto en la terapia en el sentido de que trato de enseñar a los clientes que reprimir lo que quieren no es la forma de ir.

Fue el primer entorno en el que estuve que era completamente no sexista. Pensé que había muerto y había llegado al cielo, no bromeo. 

Debes aceptar radicalmente que quieres algo que no tienes y que no es una catástrofe. Así que me quedé allí durante dos meses y luego fui a Alemania con un sacerdote católico, y en realidad, fue la primera vez en mi vida que hablé con alguien que realmente me entendió en la parte espiritual de mí. Dado que mi parte espiritual es el núcleo de mí mismo, más central que cualquier otra cosa de mí, que lo entendieran fue una experiencia asombrosa.

Tuvo un efecto transformador en mí, lo que hizo es que me dio un hogar. Ahora estoy convencido de que es la práctica de la aceptación radical en cada momento y que puede y te transformará. No tengo la menor duda de que transformaría a cualquiera, pero tiene que ser una práctica regular. Y la aceptación radical no significa que no intentes cambiar las cosas, porque solo tienes que aceptar radicalmente el momento en el que te encuentras y el pasado, pero puedes intentar cambiar el próximo momento. No puedes cambiar nada si no lo aceptas, porque si no lo aceptas, intentarás cambiar algo más que crees que es la realidad. Así que la aceptación radical es simplemente la aceptación radical de que la realidad es lo que es, y si quieres cambiarla, entonces trabajas en cambiarla, lo cual también es perfectamente legítimo. Pero creo que es difícil cambiar algo si no lo aceptas en primer lugar.”

La aceptación radical, tal como se enfatiza en la Terapia Dialéctica Conductual (TDC) de Marsha Linehan, es un enfoque fundamental para tratar una variedad de problemas emocionales y conductuales. Aquí hay una lista de pasos a seguir para poner en práctica la aceptación radical:

  1. Comprende el concepto: Antes de aplicar la aceptación radical, debes entender lo que significa. En la TDC, la aceptación radical implica aceptar completamente la realidad tal como es, sin juzgarla ni resistirla.
  2. Observa tus pensamientos y emociones: Empieza por ser consciente de tus pensamientos y emociones. Observa cómo te sientes en diferentes situaciones y presta atención a tus reacciones automáticas.
  3. Identifica la resistencia: Reconoce cuándo estás resistiendo la realidad o tratando de cambiarla. Esto incluye luchar contra pensamientos y emociones negativas o querer que las cosas sean diferentes de lo que son.
  4. Practica la no lucha: Una vez que identifiques la resistencia, trabaja en soltarla. Esto significa dejar de luchar contra tus pensamientos y emociones. Permíteles estar presentes sin tratar de cambiarlos.
  5. Mindfulness: Utiliza la atención plena (mindfulness) para mantenerte en el presente. La atención plena te ayuda a observar tus pensamientos y emociones sin juzgar. Practicar mindfulness regularmente puede fortalecer tu capacidad de aceptación radical.
  6. Valora la experiencia presente: Reconoce que cada momento presente es valioso, incluso si es doloroso o incómodo. Aprende a apreciar la vida tal como es, en lugar de esperar que sea diferente.
  7. Utiliza afirmaciones de aceptación: Crea afirmaciones positivas que fomenten la aceptación. Por ejemplo, “Puedo aceptar mis pensamientos y emociones tal como son” o “La realidad es como es, y puedo aprender de ella”.
  8. Evita el juicio: Trabaja en no juzgarte a ti mismo por tus pensamientos o emociones. El juicio solo aumenta la resistencia. En lugar de eso, acéptate a ti mismo con amor y compasión.
  9. Desarrolla la tolerancia emocional: A medida que practiques la aceptación radical, desarrollarás una mayor tolerancia a las emociones difíciles. Aprenderás que estas emociones son temporales y que puedes sobrevivir a ellas.
  10. Fomenta la flexibilidad mental: La aceptación radical te permite ser más flexible en tu pensamiento y comportamiento. En lugar de reaccionar automáticamente a las situaciones, puedes elegir cómo responder de manera más consciente.
  11. Busca apoyo profesional: La TDC, que incluye la aceptación radical, es un enfoque terapéutico complejo. Si luchas por aplicar estos principios por ti mismo, busca la ayuda de un terapeuta capacitado en TDC para una orientación más efectiva.